Uno de mis eximios y fugaces profesores, Tomás Flores, me indicaba que sin una economía libre de mercado no estaríamos en condiciones de mantener tal situación económica, hoy (año 2005). Yo, cual ignorante personaje de las finanzas, entendí que tal aseveración provenía de un hombre docto en la materia y refutar tal indicación no sería bueno para mi comprensión ni para mi evaluación.
Algo que en otra oportunidad comentaré es el racionamiento, dado que el señor Flores tocó la olla y también la común, siendo eso para mí algo secular. No obstante, si voy raudo hasta la Teoría General de Sistemas (TGS) y encasillo a ésta nación en tal hipótesis, algo no me está cuadrando. Si yo fuera laico claro estaría con el giro de los circuitos; no obstante, soy cristiano, católico y progresista.
Chile está ad portas de dar un gran salto. El brinco lo tiene que dar en éste tiempo –no estoy hablando del tiempo que nos dan después de las noticias- y el trompo anda “cucarro”. En la base de la perinola llamada Chile existen presiones atmosféricas sin parangón y el lucro, extranjero, nos abduce el circulante sin contemplación.
Claro está que si esa práctica se interconecta, los operadores foráneos proliferarán; dejando instrucciones correctas e inmutables para nuestros domésticos. Dogmas diría el cuñado del dueño de la empresa en donde trabajo –muy simpático por lo demás y con una aberración profesional por la empatía-.
Mi Señor Jorge Quiroz, es un placer y un decoro poder escribirle. Además, que mis palabras “biteadas” existan para dar una expresión muy intrínseca mía, de la cual no me puedo abstraer, se lo debo a mis progenitores abnegados que, al igual que miles, siguieron un benchamrk. Sin embargo, en ese seguimiento al líder no se encontraba el lucro, dado que el sacrificio es muy portentoso y a la familia no se le puede abandonar.
(falta un poco)
Cabe entonteces señalar que si la Buena Fe comienza a desaparecer desde el mismo Estado, no hay caso para los que están en el último escalafón. El modelo extranjero nos ha dado con todo y nuestras opciones de dar el impulso –completitos- sucumben, ante tanta negación.
¿Sabía usted que estamos cruzando una Fractura y la nueva economía está a punto de romper la burbuja hipotecaria en el farol del modelo?
Fijate.cl
Por doquier
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