miércoles, noviembre 22, 2006

En matar al padre, de Peña

Mis estimados e-contertuliuos, señor Godoy, Guerrero y Puentes – de quien he extractado su posteo ya que me ha ensimismado-. Sin olvidar a nuestro Rabadán, el cual no es objeto de críticas por parte mía, ya que el se encuentra en un sitial más decoroso que el mío, más no menos noble-

Las cuestiones en la “politosfera” debemos tratarlas como una nebulosa gigantesca. Un campo de batalla, él cual tiene todo el campo minado y escuadrones de francotiradores listos para dispara sus fusiles. Nosotros, electores expuestos a las inclemencias del ciudadano común, esbozamos tratativas para lograr entender y entregar juicio a lo que los medios tiene acceso. Sin embargo, la cotidianeidad y el presente merman con creces nuestras observaciones.

Podríamos traer a colación un sin fin de elementos que, por muy lejanos que se vean, tiene una conexión muy cercana al evento que hoy nos concita en ésta pilastra. No obstante, me referiré a una circunstancia expuesta -que hoy logré capturar- por nuestro preciado cuarto poder y que trató como lo han adiestrado a hacer:

“La hija de Buhs ha sido asaltada en B.A.” Ninguna tratativa está más alejada de la realidad que la información en si misma.

Ahora me desprendo y me integro a ésta sociedad: “No tengo estómago para hablar de aquello”. Si no hay una reflexión literal de ésta expresión, ¿qué más podemos pedirle a nuestra nación?

Hoy vivo en la verdad estática recorriendo el mundo de los que trabajan sin levantar la cabeza. Mañana –eso le he pedido a mi Creador- espero vivir en una verdad dinámica en donde todos se puedan fijar bien.

Fijate.

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